MEDICINA para la AUTOORGANIZACIÓN
DOLOR y OTROS TRASTORNOS de CAUSA NEUROLÓGICA
Dr.
Pablo Rubén Koval
Cuando el propio sistema nervioso es fuente de dolor, dicho dolor se denomina neuropático. El daño del tejido nervioso propiamente dicho puede deberse a traumatismo, cirugía, medicamentos, productos tóxicos o enfermedades como la diabetes. Cualquier segmento del sistema nervioso si es dañado o irritado puede causar dolor, cuando la parte afectada es el cerebro (tálamo) o la médula espinal se denomina dolor central o talámico, cuando está comprometido el sistema nervioso periférico se denomina neuralgia, radiculopatía, neuropatía o polineuritis, cuando la parte dañada o irritada es el sistema nervioso simpático o vegetativo se denomina distrofia simpática o Sudeck. El dolor es una de las formas que el organismo posee para expresar un desequilibrio, una desarmonía, una pérdida del orden vital. Cuando una parte del organismo duele es porque hay un trastorno en el funcionamiento de ese organismo; el orden natural tendiente al estado de salud, por alguna razón se ha perdido. Con excepción de los casos de daño directo por traumatismo, cirugía o tóxicos estos dolores representan el resultado final de un proceso. Cuando el dolor persiste en el tiempo y no responde a los tratamientos comunes, la causa habitualmente es la presencia de un campo interferente, es decir, de una irritación previa (meses, años) del sistema nervioso, en cualquier lugar del organismo, que finalmente interfiere la capacidad de autoorganización natural. Esa irritación se mantendrá en la memoria del cuerpo hasta tanto no sea corregida mediante tratamiento adecuado.
Problemas de salud
persistentes o recurrentes Los campos interferentes ejercen estímulos fuertes sobre el sistema nervioso y pueden dar lugar al establecimiento de problemas de salud persistentes o recurrentes en cualquier parte del organismo. En la misma persona pueden coexistir varios campos interferentes. La medicina clásica no reconoce su existencia.
Los campos interferentes
pueden haberse desarrollado en
donde, en algún momento de la vida de la persona, hubo: Una vez eliminados los estímulos nocivos provenientes de campos interferentes, las funciones corporales recuperan su normalidad y el organismo inicia su proceso de curación. Muchas veces los cambios son rápidos. Nuestra tarea es encontrar el origen de la irritación del sistema nervioso y resolverla. El organismo se encargará de su propia curación. Tratamiento La forma de resolver problemas tan complejos no puede basarse en analgésicos, antiinflamatorios, corticoides, antiepilépticos, clonazepán y/o antidepresivos. La corrección de los problemas locales y distantes, nuevos y viejos, propios de cada persona, sólo puede lograrse con un tratamiento que abarque la problemática en su totalidad. La medicina para la autoorganización mediante terapia neural o modulación neuromuscular cumple este objetivo. La odontología neurofocal también es parte integrante de este nuevo concepto médico. El ozono puede ser un útil complemento terapéutico. Neuropatía tóxica o por medicamentos Son numerosos los tóxicos y medicamentos que pueden dañar el sistema nervioso y causar dolor persistente. La medicina para la autoorganización aplicada a tiempo permite, en la mayoría de los casos, resolver o mejorar el problema sin toxicidad farmacológica. Dolor central: daño medular o cerebral Tras un accidente cerebrovascular (ictus, stroke, hemiplejia) o un traumatismo (paraplejia, cuadriplejia) puede ocurrir dolor central. La medicina para la autoorganización permite, en la mayoría de los casos, resolver o mejorar el problema sin toxicidad farmacológica. Radiculopatía La artrosis de columna o una hernia discal puede causar daño de una raíz nerviosa y provocar una radiculopatía. Los procedimientos quirúrgicos están indicados en situaciones extremas cuando hay parálisis o pérdida del control de esfínteres. De lo contrario corresponde tratamiento no quirúrgico. La medicina para la autoorganización aporta un abordaje sumamente útil. Neuropraxia Cuando un nervio periférico queda atrapado por un tendón, músculo u otra estructura se denomina neuropraxia. Antes de indicar un procedimiento quirúrgico corresponde intentar mediante modulación neuromuscular o terapia neural (medicina para la autoorganización) descomprimir el nervio afectado. Alcoholización. Fenolización. Termocoagulación. Termolesión. Son procedimientos de destrucción del sistema nervioso. Sus resultados son impredecibles. Las complicaciones suelen ser más graves que el problema que motivó el tratamiento. No aconsejamos su uso.
Lectura complementaria Medicina para la autoorganización Capítulo destinado a los profesionales de la salud Indice general Buscador por palabras Consulta Copyright ©
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